Esperé unos cuantos meses la noche de ayer, estaba eufórica por el recital que iba a vivir.
Pero una vez mas la realidad superó lo esperado.
Llegué relativamente temprano, había mucha gente, pero faltaba demasiado para que se llene el estadio
Ambos sabíamos que íbamos a estar ahí, los dos, al mismo tiempo, en el mismo lugar entre miles de personas, pero ninguno hizo nada para arreglar un encuentro. Porque de eso tal vez se trata esta historia, de no tener historia, ni planes. Y así y todo, nos chocamos de cuando en cuando, sin esperarlo. Como en Brasil, como en la Costa… Como anoche.
Debo reconocer, que mi mirada no pidió permiso para buscar entre la gente su cara, que por momentos se desdibuja en mi memoria… Por instantes miraba, buscaba, imaginaba…
Fue cuando casi sin darme cuenta, me topé con esos ojos verdes.
Lo veo
Me vé.
Nos miramos, y no podemos evitar sonreír.
No sé de donde saque las fuerzas pero me hice camino entre la gente, estaba a 5 personas de distancia, cuando se apagan las luces y empieza el show.
Fue ese primer pogo, en el que salí despedida hacia cualquier parte sin control, y me alejo del encuentro para no poder volver a verlo más en toda la noche.
Fue ese primer pogo, en el que salí despedida hacia cualquier parte sin control, y me alejo del encuentro para no poder volver a verlo más en toda la noche.
Fue increíble tenerlo tan cerca y no poder tocarlo.
Fue genial escuchar a Steven Tyler cantar, y traspasar la noche con su música.
Fue maravilloso que un par de gotas se hayan transformado en una lluvia tupida y pareja.
Fue liberador cantar y bailar y no poder evitar reírme de mi pelo empapado en el medio de la noche…
Después de 1.45 hs de Show impecable, chapoteando entre la lluvia, sin poder sentir frío. Iba alejándome del escenario. Iba pensando sin querer pensar…
Subo las gradas y miro hacia atrás.
No pude evitar sentirme chiquita, muy chiquita e insignificante entre tanta multitud.
Y no pude evitar pensar que ahí, entre esos miles y miles, mis ojos habían encontrado otros ojos que también me miraron…
Y pensé en el amor… porque ese estadio, anoche, con miles de personas, era solo una parte ínfima del mundo y sin embargo nos encontramos.
Pero pensé en el amor otra vez, porque lo de anoche no puede ser ni es amor, es simplemente uno de esos cimbronazos de vida que te despiertan de a ratos … Hablo del AMOR y la fuerza que éste tiene para que dos personas se encuentren en la vida…
Creo que por algo no llegué a él.
Creo que por algo ambos seguimos sin intentar encontrarnos, y dejamos que la vida o las circunstancias nos jueguen un rato.
Creo que fue hermosa la sorpresa y una vez mas, lo inesperado.
Y creo otras cosas más, pero anoche, más que creer, sentí que definitivamente, ya estoy preparada para volver a enamorarme.